sábado, 5 de julio de 2008

Junta Nacional DC: Crónica de una contienda con resultado previsible.


Alvear y su proclama contra Piñera; Frei y su discurso nacional y los villanos invitados: Lorenzini y Trivelli. El 14 de diciembre la DC elige a su candidato presidencial.

Si se utilizara la jerga futbolística, la Junta Nacional de la Democracia Cristiana versión 2008 pareciera ser un partido que se jugó con un resultado que se sabía de antemano, vale decir, que la nominación del abanderado presidencial se hará después de las elecciones municipales y antes de navidad, tal como adelantó a Cambio21 la presidenta de la DC, Soledad Alvear. La elección será bajo la modalidad “un militante un voto más los adherentes”. El 14 de diciembre, cerca de 120 mil militantes DC elegirán a su candidato presidencial.

En una elección a mano alzada, 211 miembros de la Junta Nacional aprobaron la propuesta para que se realice una votación de un militante, un voto. 64 personas optaron porque esa elección fuera una primaria abierta. Todos estos últimos seguidores de Pablo Lorenzini y Marcelo Trivelli. Los que ganaron eran partidarios de Alvear, Frei y los colorines que se quedaron en la DC.

Una Junta sin crisis y de fácil trámite.

Las proclamas de unidad y trabajo mancomunado para las municipales fueron la constante, el lobby en los pasillos del Círculo Español fue decidor de lo que se respira en el contaminado ambiente de Santiago.

Se quiso evitar la confrontación y el desorden, ganar los comicios de octubre y después “operar” y sumar o restar votos para la primaria que definirá el nombre de la flecha roja de cara a la tensa negociación con la Concertación, que tiene al ex Presidente Lagos y al actual secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, mirando de reojo la contienda DC.

Alvear ya tantea su futuro interno y externo

En su intervención inaugural, la senadora Soledad Alvear se puso el traje de abanderada presidencial y criticó con todo a su principal contendor de RN en las encuestas, el empresario Sebastián Piñera.

Estuvo acompañada de la Presidenta Michelle Bachelet y de la plana mayor del socialismo, por ende, lució más agresiva que de costumbre y llamó al dueño de Chilevisión a dejar de “especular”. Fue aplaudida de pie. No dejó de sorprender que los integrantes de la Junta DC aplaudieran fervorosamente al presidente del Partido Socialista, Camilo Escalona. "Me quieren más que en mi propio partido" dijo riéndose. Pifiado fue el secretario del Partido Radical, Ernesto Velasco. Otras pifias se produjeron cuando se nombraba al PPD. Estas dos pifias fueron por el acuerdo municipal de dos listas que llevará a la Concertación por primera vez desunidas: una lista DC-PS y otra de los PPD-PR.

A partir del domingo en la madrugada, la principal preocupación del entorno de Soledad Alvear es lo que pasará después de las municipales. Si bien la fórmula “un militante un voto” favorece su pretensión, se agregaron los adherentes. El problema es que en esta contienda electoral interna, es lo más probable que no se presenten otros candidatos, debido a la gran fortaleza interna de la líder DC.

Aunque algunos delegados alvearistas tienen la percepción de que “Frei no se inscribirá a menos de que no haya nadie dispuesto a hacerlo”, se tiene por asumido que el freísmo “está esperando su oportunidad para hacerle daño a Alvear”.

Por eso se vieron duras conversaciones en las esquinas del establecimiento ubicado en Alameda, a pocos metros de la sede central de la colectividad.

Frei y su cambio de giro

Fue aplaudido a ratos, vitoreado al final de sus extensas palabras (¡”Frei, Frei, Frei!”), sacó risas con sus bromas entre idea e idea y escuchado con atención por los asistentes al cónclave DC.

El actual senador por Valdivia actúa como candidato a La Moneda, habla como tal y se dirige a sus camaradas con el semblante de un hombre que quiere volver a ponerse la banda tricolor. Pero no, él dice que “hoy no estamos para el tema presidencial”, sí al municipal.

Apenas terminada su intervención, el equipo cercano del otrora senador vitalicio compuesto por Álex Figueroa, Guillermo Pickering y Belisario Velasco, entre otros, se encerró a conversar los pasos a seguir.

Si no se quería participar de un debate que tuviera como centro de atención la modalidad de elección del candidato del partido, a qué otra cosa podría ser. Se prevé que el trabajo para reconquistar las bases de cara a una junta post octubre será la convicción de un sector que se sintió aludido cuando el ex Jefe de Gobierno llamó a “terminar con los operadores políticos y la corrupción”, como requisito indispensable para lograr la modernización del Estado.

Así se captó cuando hubo bromas cruzadas entre dirigentes alvearistas y freístas, como también en el momento en que Frei era fuertemente reconocido por la militancia y un par de diputados se tapaba la cara aceptando en silencio que el discurso caló en muchos de los ahí presentes.

Los patitos feos de la junta

Marcelo Trivelli fue escasamente aplaudido cuando fue llamado a la tarima para iniciar sus palabras, incluso recibió tímidas burlas, pero a medida que fue avanzando en sus contenidos (violencia intrafamiliar, autocrítica interna, dardos a los socios pepedés y radicales y un sinfín de recuerdos de su padre ex ministro de Frei Montalva), recibió más aplausos que los que se anticipaban.

Dialogando con miembros de la DC en los alrededores de la aula principal, la sensación fue sólo una: “nadie quiso que él se inscribiera como candidato presidencial, lo hizo porque a él se le ocurrió”.

Sin embargo, los mismos que lo critican aseguran que en la primaria decé podría obtener más del 5% de los votos, “más que Pablo Lorenzini”, según unos históricos operadores de la falange que escuchaban su discurso.

Por el lado del díscolo diputado por el Maule, el más esperanzado es el propio aludido. Pablo Lorenzini cree que sacará el 10% de los votos.

Lo afirmó a los cuatro vientos sin temor equivocarse, como asimismo que “yo no quiero más juntas, sólo trabajar y ganar las municipales. Después hablaremos de primarias donde el que quiera competir que lo haga. Yo me voy a inscribir y espero sacar muchos puntos, aunque con 5 soy feliz”.

El caudillo del puente Loncomilla está seguro “cuando llegue la hora de las inscripciones, ni Frei, ni Trivelli lo van a hacer y quien va a tener que validar a la Soledad Alvear voy a hacer yo. Total, con algo hay que divertirse, ¿no?".

Fuente: Cambio 21.
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