jueves, 20 de marzo de 2008

Consideraciones frente a la elección Municipal en Peñaflor - Braulio Contador.


Didácticamente dividiremos este planteamiento en externo e interno

Externamente:

La comunidad de Peñaflor, al igual que ocurre en el país, ha sido permeable a la campaña de descrédito hacia los Partidos Políticos, especialmente de la Concertación y dentro de ella, en mayor medida, el nuestro. Claro que el proceder de algunos de nuestros dirigentes y militantes ha ayudado bastante a esto.
La gente abomina de las peleas entre los políticos, las descalificaciones y la falta de transparencia.
Al contrario, ve con buenos ojos a quienes reconociendo lo positivo del adversario propone alternativas reales a los problemas cotidianos.

En el plano Municipal tenemos un Alcalde de características populistas que trabajó durante cuatro años, mientras era concejal, la veta del asistencialismo y el clientelismo. Al ser electo alcalde, en dos períodos consecutivos, ha perfeccionado esta línea agregándole un gran despliegue comunicacional.

El Alcalde UDI obtuvo en la última elección votos transversales, de modo que aunque la concertación ganó en la elección de Concejales él se impuso cómodamente y por un amplio margen a nuestro candidato.

La imagen de realizador, con plazas, paseos públicos, camionetas de Seguridad Ciudadana que recorren la comuna, médico a domicilio, clínica dental móvil, etc., son muestras de una gestión basada en la captación de los grandes sectores que no son clientes de la Municipalidad y que corresponden a la mayor parte de los habitantes de nuestra comuna.

Los clientes de la Municipalidad, es decir las personas que permanentemente acuden por algún tipo de ayuda, serán proclives al Alcalde mientras siga apoyándolos.
¡Cuidado! Este segmento de personas recibirán todo lo que se les ofrezca y ofrecerán su apoyo o voto a todo él o la que se los pida, aunque al final optarán por quien vean ganador.

Con este fin ha aumentado el gran endeudamiento que la Municipalidad ha ido adquiriendo. Hay cifras que señalan que se superan los tres mil millones de pesos, no obstante esa situación es similar a la que atraviesa la gran mayoría de los municipios pobres de nuestro País.

El Concejo Comunal ha sido nulo en su gestión. La comunidad no percibe la utilidad de ese cargo y tiene, en general, una mala imagen de sus integrantes.
Al contrario del Alcalde que entrega una cuenta anual de la marcha Municipal, los concejales han eludido sistemáticamente la idea de dar a conocer lo que han hecho y cuales son los resultados de su accionar.

Internamente:

Nuestro Partido se encuentra en crisis, la gente lo sabe o, a lo menos, lo percibe. Los problemas de corrupción, indisciplina, mantención de cuotas de Poder, utilización del Partido para fines personales, desunión, presencia de grupos excluyentes, eliminación de instancias de diálogo interno, etc., son algunas de las características que se manifiestan claramente.

En las últimas elecciones llevamos candidato a Alcalde, que se perdió en forma estrepitosa y tres candidatos a concejal, entre ellos al Presidente Comunal, al Primer Vicepresidente comunal y al Concejal en ejercicio.

En dicha elección la cifra repartidora estuvo en los tres mil quinientos votos. Uno solo de nuestros candidatos, quizá por ser hijo del candidato a Alcalde, obtuvo una cifra superior a ésta. El Concejal en ejercicio obtuvo cerca de dos mil votos y el Presidente comunal cerca de quinientos.

Los candidatos hicieron su campaña individualmente y muchos de nuestros camaradas, debido a la poca transparencia de la designación de candidatos y a las características negativas que hemos adoptado como Partido, trabajaron y votaron a favor e la candidata, independiente dentro del Partido Radical, Angie Farías.

No olvidemos que los candidatos del Partido, fueron propuestos por el Consejo Comunal, que contaba con 10 electores, La mesa comunal, que había ganado la elección por un margen de 11 votos a la otra lista, (7 integrantes), La JDC (1 integrante) y los Concejales en ejercicio (2 integrantes).

De los precandidatos cinco eran parte del consejo Comunal (El Presidente, el Primer Vicepresidente, el Secretario y los dos Concejales), y resultaron designados candidatos: a Alcalde: El Concejal Kellendonk y a Concejales el Concejal Caroca, el Presidente Comunal y el Primer Vicepresidente Comunal. Cabe señalar que el voto de la JDC correspondía al hijo del Presidente comunal y votó… por su papá.

No hubo presencia del Partido en la coordinación ni en la implementación de las campañas. La Directiva comunal se destrozó y la DC de Peñaflor siguió en el inmovilismo.

En la última elección comunal interna la segunda vuelta se definió entre la lista que encabezaba el Presidente comunal en ejercicio y la lista que encabezaba el Secretario Comunal en ejercicio. Ganó esta última con la promesa de que 1.- No se utilizaría la mesa para futuras candidaturas. Y 2.- Integraría la mesa con la lista que obtuvo el tercer lugar. (Cabe señalar que las tres listas en disputa obtuvieron alrededor de un tercio de los votos cada una).

Hoy, en esta nueva etapa, de los dos pre candidatos a Alcalde (sa) una pertenece al Consejo Comunal del PDC, la camarada Leontina Salazar (Directora del departamento Femenino del PDC comunal) y de los seis pre candidatos a Concejales tres pertenecen al Consejo Comunal del PDC de Peñaflor, los camaradas Francisco Sepúlveda (Presidente Comunal), Juan Caroca (Segundo Vicepresidente Comunal) y Arturo Villagrán (Representante del frente de Trabajadores).

Experiencia Municipal tienen el camarada Osvaldo Huerta, pre candidato a Alcalde (ocho años Concejal), el camarada Juan Caroca (actual Concejal) y el camarada Arturo Villagrán (Funcionario municipal, dirigente de ASEMUCH)

Conclusiones:

A partir de lo anterior podemos señalar algunas premisas básicas:

Al actual Alcalde no se le va a ganar en su terreno. Plantear un programa basado en prácticas de asistencialismo y clientelismo no será el camino adecuado. Debemos conducir nuestra campaña a captar la adhesión de los sectores que siempre estuvieron con la DC, es decir personas de trabajo que no quieren que se les de, sino que se planteen las condiciones que permitan su espíritu emprendedor.

No podemos tener una actitud demasiado confrontacional, a las personas no les agrada presenciar ataques entre los candidatos. Hay que tomar lo bueno que existe y a partir de eso elaborar nuestros planteamientos. Las críticas deberán hacerse sobre bases fundadas de tal manera que no dejen lugar a dudas.

Nuestros candidatos deben ser coherentes con el Programa propuesto. Debe existir credibilidad siempre. Si planteamos un programa basado en el asistencialismo nuestros candidatos deben ser reconocidos dentro de esa forma de operar, en cambio si lo que ofrecemos es innovación, emprendimiento y visión de futuro debemos llevar candidatos acordes a ese perfil.

Los precandidatos deben estar a disposición del Partido en ese aspecto. Debemos invitar a cada uno de ellos a mirarse con una visión generosa que tenga como objetivo lo mejor para la comunidad y para el Partido.

Debe haber consistencia y coherencia entre nuestro candidato a Alcalde y nuestros candidatos a concejales porque las personas observan nuestro accionar. La amistad cívica debe ser la vía señera y el Partido el llamado a ser parte importante en la difusión de nuestro Programa y nuestros candidatos.

Los camaradas que son oficialmente precandidatos y forman parte de las estructuras partidarias deben dejar sus cargos. De lo contrario estarían llevando al Partido a una situación de stress ya vivida y que nos costará, esta vez, mucho más caro.

Con estas condiciones todos los militantes, sin excepción alguna, deberíamos hacer nuestro aporte a un nuevo posicionamiento de nuestro Partido en la comuna.

Nuestros precandidatos a Alcalde (sa), nuestros precandidatos a Concejales, La Directiva Comunal, y los militantes DC de Peñaflor, cada uno desde nuestra posición, debemos asumir la responsabilidad de entregar a los habitantes de nuestra Comuna un gobierno Comunal realmente a su servicio.

Braulio Contador
Militante de Peñaflor
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