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Cuando se afirma que todos los demócratas cristianos somos responsables del desastroso resultado electoral del 26 de octubre pasado, debemos ser claros: hay unos más culpables que otros y hay, definitivamente, algunos y algunas que luchamos internamente porque esto no fuera así. No fuimos escuchados.
Efectivamente se conformó un listado nacional de candidatos y candidatas que, primero respondieron a la lógica de lotes internos; después a la incondicionalidad a diversos cacicazgos y, en general, a la lógica que ha primado en la DC en los últimos años: conservar el poder a como de lugar. Para ello se convirtió al Consejo Nacional en una estructura partidaria sin opinión sobre los grandes temas que importan a las personas. Reunidos durante meses sólo para revisar listados de nombres y luego, sometido a estado de hibernación, porque había una campaña municipal que llevar adelante.
Desde hace años que situaciones de relevancia para el pueblo chileno no pasan por esta instancia que debería ser de reflexión y proyecciones para servir al pueblo de Chile. Nada de salud pública; menos de diseño de políticas públicas; de análisis de coyuntura mundial ambiental y económica (el calentamiento global es producto de un modelo de desarrollo impuesto); menos de educación pública – la misma que brindó una profesión a un alto porcentaje de figuras públicas y últimos cuatro presidentes de la República- nada de política laboral y previsional, cero de preocupación por la seguridad pública mirada desde una perspectiva que vaya más allá de la represión; nada de políticas públicas para apoyar a nuestros jóvenes talentos en el deporte y la cultura, en las ciencias, las artes y las tecnologías. Nada sobre el mundo sindical, nada sobre trabajar por convicción sin esperar la retribución del poder, nada sobre el liderazgo social, nada sobre la juventud y las mujeres. Mientras esto pasaba, levantamos nuestra voz demandando opinión y posición sobre estos temas. Pero, lo que nos diferenciaba de otros camaradas, es que nuestras opiniones políticas las canalizábamos donde correspondía: en las reuniones del Consejo Nacional (donde siempre perdíamos ante la votación ordenada y estructurada de los lotes), en las directivas comunales, provinciales y regionales.
No usamos los medios de comunicación para afirmar, una y otra vez, que cada día se afianzaba en nosotros la certeza de que el modelo económico aplicado sin discusión ni análisis por la Concertación y la DC, debía ser rectificado y así lo hicimos saber en los planteamientos del Quinto Congreso, aprobado por la mayoría del PDC, señalando que debíamos luchar por una Constitución Política legítima en el origen y democrática en su doctrina; que el modelo de desarrollo aceptado está destruyendo el mundo; que estamos hipotecando el futuro de nuestros hijos y nietos; por lo observado, la gestión de los municipios no ha sido bien evaluada por la ciudadanía. No, no lo hicimos, siendo siempre respetuosos de los canales formales existentes en nuestro Partido.
Hoy día, cuando el pueblo chileno y el pueblo demócrata cristiano nos ha pasado la larga cuenta que acumulamos, decimos, nuevamente, que estamos dispuesto al trabajo persistente, abnegado, coherente, cristiano, solidario y humanista, por lograr que nuestro partido recupere su rol histórico: ser vanguardia inteligente; ser escudo de los pobres; ser adalid de la clase media; ser voz de los que no tienen voz.
Por ello creemos que en la próxima Junta Nacional el gran tema debe ser el cómo recomponernos. Nada de candidaturas de ninguna especie; nada de cálculos de corto plazo; nada de ampliaciones de alianzas políticas con el sólo afán de no perder el poder. Unidad, unidad, unidad. Pero unidad sobre la base de rectificar, respetando las distintas historias.
Para eso este grupo humano, herido por la pérdida de muchos/as camaradas de gran valía que fueron expulsados o se han ido del Partido, está abierto, dispuesto a trabajar en nuevas fórmulas de integración. No pensamos ni en cargos ni en candidaturas, sí en una participación plena, responsable y efectiva en la dirección de un partido herido, pero todavía vivo, porque nuestros fundamentos ideológicos están ahí. La revolución en libertad es todavía posible.
Pensamos que somos idóneos y representativos de una importante base militante y simpatizante de nuestro Partido y por lo mismo, estamos dispuestos a trabajar en un proceso de integración, sin exclusiones, donde nadie quede fuera de este esfuerzo que debe ser común a la militancia y dirigencia partidaria. Además, tenemos una reconocida vida partidaria en las bases de nuestra organización; somos conocidos por nuestra dedicación partidaria y pensamiento acorde con nuestro tiempo, pero por sobre todo, por ser fieles a nuestros ideales fundacionales.
Por lo mismo, queremos seguir adelante en la lucha por un mundo mejor, que nos legaran, como ejemplo, los fundadores de la Falange y tantos y tantos miles de demócratas cristianos que dedicaron su vida a servir al pueblo de Chile.
Nibaldo Ahumada, Concejal de Lo EspejoHernán Álvarez, Profesor, Concejal de Chillan y Presidente Comunal PDC de ChillánMaria Arcos, Presidenta Comunal de Curacaví y actual Concejal CuracaviMarta Canto, Lic.Ciencias Politicas y Adm.Administradora Pública-Militante PDCMarcelo Carrasco, Presidente Regional del PDC IX Región (La Araucanía)Margarita Cofre, Concejal de Maria PintoPedro Concha, Concejal de RencaOmar Cornejo, Concejal de AlhuéMildred Garrido, Presidenta Comunal de IquiqueRené González González, Presidente Departamento de Educación PDCFelipe Delpín, Concejal de La GranjaGabriel de Pujadas, Miembro de la Junta Nacional por el Frente de Profesionales. Educador.Felipe de Pujadas, Abogado, reelecto Concejal de Las Condes PDCSergio Hernández, Concejal Vitacura pdcDavid Herrera, Abogado, ex Consejero Nacional PDCMarcelo Ortiz, Profesor de Historia- Consejero Nacional PDCGuido Manríquez, Ingeniero Comercial, Concejal de CerrillosEnzo Pistacchio S., Ex Vicepresidente nacional y consejero nacional del PDCRodrigo Plaza, Concejal de LampaCristián Sandoval, Miembro del Consejo Regional (CORE) de la RM.José Luis Torres, Presidente Regional PDC Arica-ParinacotaMarcelo Urrutia, Consejero Nacional PDCMyriam Verdugo, Periodista, Consejera Nacional PDCHugo Yañez, Primer Vicepresidente Provincia Cordillera del PDC
Gentileza: Marta Canto C.
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