¿Qué te parece la polémica por la prohibición de la píldora del día después?
Hay que esperar el fallo del Tribunal Constitucional, ya que nadie sabe realmente de qué se trata y sólo hay conjeturas. A mí me puede gustar o no gustar, pero los fallos hay que acatarlos. Si esta es la institucionalidad que acordamos, se debe respetar; uno no puede estar cuestionando al tribunal sobre la base de sus decisiones puntuales. Eso no es bueno para la democracia, por lo que me parecen muy mal las críticas destempladas de algunos parlamentarios.
El Gobierno también ha cuestionado la resolución del Tribunal Constitucional, ¿La Moneda debería simplemente acatar el fallo?
A mí tampoco me gusta lo que ha trascendido de éste, pero no se puede simplemente tirar el mantel.
¿La petición de renuncia de Mario Fernández, efectuada por Carlos Ominami, enturbia el ambiente en la Concertación?
Completamente. Ominami y otros parlamentarios no sólo son poco cuidadosos con la democracia y la DC, sino que además tensionan la agenda imponiendo temas que no están entre los acuerdos políticos que hemos definido para esta etapa. Es un gran error político tensar a la DC; nosotros debemos representar a un mundo que culturalmente convive con la ambigüedad de no tener algunos tópicos totalmente definidos. Yo, por ejemplo, no tengo suficientemente claro lo de la píldora. A ese sector es el que la DC debe representar; de lo contrario, lo hará la derecha
.
¿Soledad Alvear debería ser la que conteste esas críticas?
Sin duda que hay que responder, aunque no necesariamente siempre tenga que hacerlo ella. No sé si vale la pena entrar en un juego con Ominami padre y Ominami hijo. Eso sería gastar pólvora en gallinazos.
¿Qué opinas de la actuación de tu camarada Mario Fernández? Se dice que él se rige por los dictámenes de la jerarquía de la Iglesia Católica.
Fernández no es el representante de la Concertación en el tribunal. Ese no es su rol, él es juez y debe mantener su independencia del Gobierno y de la Iglesia.
¿Crees que Fernández ha sido demasiado influenciado por los obispos?
Él actúa de acuerdo a sus convicciones, lo mismo que el resto de los miembros del tribunal.
La DC ha sido bastante cauta al referirse públicamente sobre la píldora del día después. ¿Hay muchas visiones contrapuestas al interior del partido?
Hay consenso en que frente a este tema la autonomía de las personas y la igualdad de acceso a un anticonceptivo son muy importantes. Se debe hacer un debate de fondo sobre si la píldora es abortiva o no; mi impresión es que no lo es, pero si lo fuera debería prohibirse en todas partes, no sólo en los consultorios.
A la DC se la ve dividida en este debate.
Estos temas siempre han tensionado al partido. La DC no está por legalizar el aborto, y en esos estamos todos de acuerdo. En ese contexto, algunos tienen legítimas dudas sobre si esta píldora es abortiva.
Como una de las impulsoras de la Ley de Divorcio, tú sufriste en carne propia las presiones de la Iglesia Católica. ¿Es muy dura la jerarquía con los políticos católicos?
Yo viví una presión muy fuerte y hubo poca comprensión al rol que jugamos varios diputados católicos en esa época. Yo siento que la Iglesia actual tiene escasa tolerancia a la autonomía de católicos en política. Ser autoridad eclesiástica es distinto a ser político; mientras los obispos tienen el papel de establecer cuál es el ideal de conducta, nosotros somos los que hacemos de mediación entre esa posición y la realidad. La Iglesia ha asumido una postura muy defensiva frente al mundo moderno. Eso ha producido que muchos la vean como muy lejana, especialmente debido a su discurso moralista.
¿A tus camaradas les cuesta tomar distancia de las posiciones de la Iglesia?
Hay distintas formas de ser católico en política; la derecha conservadora tiende a decir: "Vamos a dar testimonio de la ‘verdad’"; otros, en cambio, creemos que hay que ser más prudentes y hacerse cargo de la realidad de la gente. Desgraciadamente, la jerarquía de la Iglesia valora mucho más la actitud de los políticos de derecha, mientras que rechaza a los que tenemos otra visión
.
¿Influye realmente la Iglesia en las decisiones de los políticos católicos?
Los políticos han sabido actuar con bastante autonomía. La Ley de Divorcio, pese a que se demoró diez años, finalmente se aprobó.
Soledad Alvear no se ha pronunciado sobre la píldora. ¿Ella ha tomado esa postura por temor a molestar a la Iglesia?
Alvear no puede opinar porque todavía no se conoce el fallo en detalle, así que debe esperar hasta tener todos los antecedentes.
Para algunos, el que Alvear no hable sobre los temas más polémicos demuestra la debilidad de su liderazgo. Ricardo Lagos y José Miguel Insulza sí han dado su opinión.
Es que ellos son de izquierda, nosotros representamos al centro, a un sector donde estos temas nos conflictúan.
¿Alvear debería proclamar ya su candidatura?
Esa decisión tiene que ser muy bien pensada, ya que el partido quedaría muy débil si es que, una vez más, se proclama una candidatura y después ésta se baja. Hoy, Soledad es la carta más fuerte del partido, pero todavía pueden pasar muchas cosas.
¿Como que surja otro candidato?
Siento que hay poco espacio para eso, pero uno nunca sabe.
¿Hay nerviosismo en la DC porque la candidatura Alvear no se consolida?
Yo no percibo eso. Todos sabíamos que la DC, y especialmente Alvear, iba a pagar un costo por la decisión de expulsar a Adolfo Zaldívar. Probablemente, ella lo está pagando y hay que esperar para ver cómo se revierte. Creo que el coraje que ella tuvo al operar al partido de un tumor canceroso e irrecuperable, finalmente le traerá buenos dividendos.
¿Coincides en que Alvear no prende como candidata?
Lo que no ha prendido es un liderazgo claro y único en la Concertación. Eso tiene mucho que ver con el desgaste de la coalición y del Gobierno. Pero las cosas no son definitivas y el escenario puede variar mucho, porque hoy todo está muy revuelto. Y esto se ve en la Alianza también; hasta hace poco se pensaba que los dividendos se los llevaría la derecha, pero ellos tienen una fatalidad que le hace un gran favor a la Concertación. Nosotros lo podemos estar haciendo muy mal, pero en la Alianza lo hacen peor. Es por eso que los dados no están echados todavía.
¿Alvear tiene falencias como candidata?
Existe la sensación de que la DC se mira más a sí misma que a la ciudadanía. Para potenciar su liderazgo, Alvear tiene que romper esa distancia con la gente, ser más audaz y terminar con esa imagen de estar metida en ese pantano que es la política partidaria. A mí me hubiera gustado que la mesa directiva hubiera integrado a nombres distintos y más nuevos, por ejemplo. Me gustaría verla jugándose por temas que pueden ser impopulares, como la energía nuclear.
¿Esta lejanía entre los partidos y la gente es más marcada en la DC?
Todos la sufren, pero nosotros la vivimos especialmente por ser el partido con más historia y peso. Los políticos todavía piensan que la gente quiere que el Estado le resuelva sus problemas, cuando la verdad es que lo que lo único que esperan es más transparencia y que las reglas del juego sean parejas para todos. Mientras, los políticos siguen pensando en darle "cositas".
¿Como el bono de 20 mil pesos para las familias más pobres?
Esa es una medida asistencialista. Hay que empoderar a la gente y no simplemente darle 20 mil pesos una vez al año.
Como ex ministra de Educación y actual sostenedora, ¿crees que Yasna Provoste tiene responsabilidad en los desórdenes administrativos del ministerio?
La acusación constitucional es precipitada, injusta y desproporcionada. Pero también considero que el Gobierno se ha defendido mal; la ciudadanía no entiende si esto se trata sólo de un desorden o de un robo. La gente, más bien, tiene la sensación de que aquí se han llevado la plata en carretillas. Esa confusión es tanto una responsabilidad de La Moneda como del ministerio. Yo, por ejemplo, soy muy crítica del vocero de Gobierno porque él enfrenta los problemas de manera liviana y confrontacional, y no explica bien las cosas. Hubiera preferido ver a Yasna Provoste explicando con "peras y manzanas" lo que sucedió, antes que decir que se la mira en menos o se la discrimina por ser mujer.
¿Usted cree que hubo robo o sólo desorden administrativo?
Mi convicción es que es un problema administrativo, pero aquí el tema de fondo es la urgencia de la reforma y modernización del Estado. Yo valoro las medidas propuestas en esa línea por el ministro Edmundo Pérez Yoma, pero no son suficientes.
¿En este desorden hay también una responsabilidad de la ministra Provoste?
Las responsabilidades políticas siempre existen, pero aquí se está hablando de aspectos muy específicos sobre los que un ministro no puede tener una supervisión total.
Ella ha dicho que es prácticamente imposible controlar cada aspecto del ministerio.
Ha habido ministros que han trabajado más internamente y otros que se han enfocado más hacia fuera y a buscar acuerdos políticos. Yo tengo la impresión de que cuando un ministro no se mete bien en lo interno, las cosas se sueltan, y es probable que eso haya sucedido ahora.
¿Ella debería renunciar para evitar ser inhabilitada por cinco años?
Si hubiera una negociación para evitar la acusación, yo lo haría, pero si ésta va igual, es mejor que muera con las botas puestas.
Ustedes dos tuvieron varios roces por temas como el lucro de la educación. ¿Cuál es tu evaluación del desempeño de Provoste?
Yo nunca he sido su detractora, aunque sí tuve una fuerte discrepancia con los proyectos que el Gobierno presentó al comienzo de su mandato. Sin embargo, es tremendamente valioso que la ministra haya logrado un muy buen acuerdo en educación. Eso habla de su gran habilidad política.
¿Ella alguna vez te excluyó de reuniones mientras se discutía sobre la reforma educacional por celos debido a tu experiencia como ex ministra?
No tiene ningún sentido hablar de eso.
Tú misma acusaste al Mineduc de hacerte una "encerrona" durante el congreso de la DC por el tema del lucro de la educación.
Eso es algo que ya pasó.
¿A Provoste le ha faltado hacer una autocrítica y reconocer errores?
No tengo juicio sobre eso.
¿Qué te parece lo mediático de sus apariciones luego de la votación en la Cámara de Diputados?
Esas son las formas de la política moderna; a mí pueden no gustarme, pero ella las utiliza bien. J.Cristobal Villalobos.
Hay que esperar el fallo del Tribunal Constitucional, ya que nadie sabe realmente de qué se trata y sólo hay conjeturas. A mí me puede gustar o no gustar, pero los fallos hay que acatarlos. Si esta es la institucionalidad que acordamos, se debe respetar; uno no puede estar cuestionando al tribunal sobre la base de sus decisiones puntuales. Eso no es bueno para la democracia, por lo que me parecen muy mal las críticas destempladas de algunos parlamentarios.
El Gobierno también ha cuestionado la resolución del Tribunal Constitucional, ¿La Moneda debería simplemente acatar el fallo?
A mí tampoco me gusta lo que ha trascendido de éste, pero no se puede simplemente tirar el mantel.
¿La petición de renuncia de Mario Fernández, efectuada por Carlos Ominami, enturbia el ambiente en la Concertación?
Completamente. Ominami y otros parlamentarios no sólo son poco cuidadosos con la democracia y la DC, sino que además tensionan la agenda imponiendo temas que no están entre los acuerdos políticos que hemos definido para esta etapa. Es un gran error político tensar a la DC; nosotros debemos representar a un mundo que culturalmente convive con la ambigüedad de no tener algunos tópicos totalmente definidos. Yo, por ejemplo, no tengo suficientemente claro lo de la píldora. A ese sector es el que la DC debe representar; de lo contrario, lo hará la derecha
.
¿Soledad Alvear debería ser la que conteste esas críticas?
Sin duda que hay que responder, aunque no necesariamente siempre tenga que hacerlo ella. No sé si vale la pena entrar en un juego con Ominami padre y Ominami hijo. Eso sería gastar pólvora en gallinazos.
¿Qué opinas de la actuación de tu camarada Mario Fernández? Se dice que él se rige por los dictámenes de la jerarquía de la Iglesia Católica.
Fernández no es el representante de la Concertación en el tribunal. Ese no es su rol, él es juez y debe mantener su independencia del Gobierno y de la Iglesia.
¿Crees que Fernández ha sido demasiado influenciado por los obispos?
Él actúa de acuerdo a sus convicciones, lo mismo que el resto de los miembros del tribunal.
La DC ha sido bastante cauta al referirse públicamente sobre la píldora del día después. ¿Hay muchas visiones contrapuestas al interior del partido?
Hay consenso en que frente a este tema la autonomía de las personas y la igualdad de acceso a un anticonceptivo son muy importantes. Se debe hacer un debate de fondo sobre si la píldora es abortiva o no; mi impresión es que no lo es, pero si lo fuera debería prohibirse en todas partes, no sólo en los consultorios.
A la DC se la ve dividida en este debate.
Estos temas siempre han tensionado al partido. La DC no está por legalizar el aborto, y en esos estamos todos de acuerdo. En ese contexto, algunos tienen legítimas dudas sobre si esta píldora es abortiva.
Como una de las impulsoras de la Ley de Divorcio, tú sufriste en carne propia las presiones de la Iglesia Católica. ¿Es muy dura la jerarquía con los políticos católicos?
Yo viví una presión muy fuerte y hubo poca comprensión al rol que jugamos varios diputados católicos en esa época. Yo siento que la Iglesia actual tiene escasa tolerancia a la autonomía de católicos en política. Ser autoridad eclesiástica es distinto a ser político; mientras los obispos tienen el papel de establecer cuál es el ideal de conducta, nosotros somos los que hacemos de mediación entre esa posición y la realidad. La Iglesia ha asumido una postura muy defensiva frente al mundo moderno. Eso ha producido que muchos la vean como muy lejana, especialmente debido a su discurso moralista.
¿A tus camaradas les cuesta tomar distancia de las posiciones de la Iglesia?
Hay distintas formas de ser católico en política; la derecha conservadora tiende a decir: "Vamos a dar testimonio de la ‘verdad’"; otros, en cambio, creemos que hay que ser más prudentes y hacerse cargo de la realidad de la gente. Desgraciadamente, la jerarquía de la Iglesia valora mucho más la actitud de los políticos de derecha, mientras que rechaza a los que tenemos otra visión
.
¿Influye realmente la Iglesia en las decisiones de los políticos católicos?
Los políticos han sabido actuar con bastante autonomía. La Ley de Divorcio, pese a que se demoró diez años, finalmente se aprobó.
Soledad Alvear no se ha pronunciado sobre la píldora. ¿Ella ha tomado esa postura por temor a molestar a la Iglesia?
Alvear no puede opinar porque todavía no se conoce el fallo en detalle, así que debe esperar hasta tener todos los antecedentes.
Para algunos, el que Alvear no hable sobre los temas más polémicos demuestra la debilidad de su liderazgo. Ricardo Lagos y José Miguel Insulza sí han dado su opinión.
Es que ellos son de izquierda, nosotros representamos al centro, a un sector donde estos temas nos conflictúan.
¿Alvear debería proclamar ya su candidatura?
Esa decisión tiene que ser muy bien pensada, ya que el partido quedaría muy débil si es que, una vez más, se proclama una candidatura y después ésta se baja. Hoy, Soledad es la carta más fuerte del partido, pero todavía pueden pasar muchas cosas.
¿Como que surja otro candidato?
Siento que hay poco espacio para eso, pero uno nunca sabe.
¿Hay nerviosismo en la DC porque la candidatura Alvear no se consolida?
Yo no percibo eso. Todos sabíamos que la DC, y especialmente Alvear, iba a pagar un costo por la decisión de expulsar a Adolfo Zaldívar. Probablemente, ella lo está pagando y hay que esperar para ver cómo se revierte. Creo que el coraje que ella tuvo al operar al partido de un tumor canceroso e irrecuperable, finalmente le traerá buenos dividendos.
¿Coincides en que Alvear no prende como candidata?
Lo que no ha prendido es un liderazgo claro y único en la Concertación. Eso tiene mucho que ver con el desgaste de la coalición y del Gobierno. Pero las cosas no son definitivas y el escenario puede variar mucho, porque hoy todo está muy revuelto. Y esto se ve en la Alianza también; hasta hace poco se pensaba que los dividendos se los llevaría la derecha, pero ellos tienen una fatalidad que le hace un gran favor a la Concertación. Nosotros lo podemos estar haciendo muy mal, pero en la Alianza lo hacen peor. Es por eso que los dados no están echados todavía.
¿Alvear tiene falencias como candidata?
Existe la sensación de que la DC se mira más a sí misma que a la ciudadanía. Para potenciar su liderazgo, Alvear tiene que romper esa distancia con la gente, ser más audaz y terminar con esa imagen de estar metida en ese pantano que es la política partidaria. A mí me hubiera gustado que la mesa directiva hubiera integrado a nombres distintos y más nuevos, por ejemplo. Me gustaría verla jugándose por temas que pueden ser impopulares, como la energía nuclear.
¿Esta lejanía entre los partidos y la gente es más marcada en la DC?
Todos la sufren, pero nosotros la vivimos especialmente por ser el partido con más historia y peso. Los políticos todavía piensan que la gente quiere que el Estado le resuelva sus problemas, cuando la verdad es que lo que lo único que esperan es más transparencia y que las reglas del juego sean parejas para todos. Mientras, los políticos siguen pensando en darle "cositas".
¿Como el bono de 20 mil pesos para las familias más pobres?
Esa es una medida asistencialista. Hay que empoderar a la gente y no simplemente darle 20 mil pesos una vez al año.
Como ex ministra de Educación y actual sostenedora, ¿crees que Yasna Provoste tiene responsabilidad en los desórdenes administrativos del ministerio?
La acusación constitucional es precipitada, injusta y desproporcionada. Pero también considero que el Gobierno se ha defendido mal; la ciudadanía no entiende si esto se trata sólo de un desorden o de un robo. La gente, más bien, tiene la sensación de que aquí se han llevado la plata en carretillas. Esa confusión es tanto una responsabilidad de La Moneda como del ministerio. Yo, por ejemplo, soy muy crítica del vocero de Gobierno porque él enfrenta los problemas de manera liviana y confrontacional, y no explica bien las cosas. Hubiera preferido ver a Yasna Provoste explicando con "peras y manzanas" lo que sucedió, antes que decir que se la mira en menos o se la discrimina por ser mujer.
¿Usted cree que hubo robo o sólo desorden administrativo?
Mi convicción es que es un problema administrativo, pero aquí el tema de fondo es la urgencia de la reforma y modernización del Estado. Yo valoro las medidas propuestas en esa línea por el ministro Edmundo Pérez Yoma, pero no son suficientes.
¿En este desorden hay también una responsabilidad de la ministra Provoste?
Las responsabilidades políticas siempre existen, pero aquí se está hablando de aspectos muy específicos sobre los que un ministro no puede tener una supervisión total.
Ella ha dicho que es prácticamente imposible controlar cada aspecto del ministerio.
Ha habido ministros que han trabajado más internamente y otros que se han enfocado más hacia fuera y a buscar acuerdos políticos. Yo tengo la impresión de que cuando un ministro no se mete bien en lo interno, las cosas se sueltan, y es probable que eso haya sucedido ahora.
¿Ella debería renunciar para evitar ser inhabilitada por cinco años?
Si hubiera una negociación para evitar la acusación, yo lo haría, pero si ésta va igual, es mejor que muera con las botas puestas.
Ustedes dos tuvieron varios roces por temas como el lucro de la educación. ¿Cuál es tu evaluación del desempeño de Provoste?
Yo nunca he sido su detractora, aunque sí tuve una fuerte discrepancia con los proyectos que el Gobierno presentó al comienzo de su mandato. Sin embargo, es tremendamente valioso que la ministra haya logrado un muy buen acuerdo en educación. Eso habla de su gran habilidad política.
¿Ella alguna vez te excluyó de reuniones mientras se discutía sobre la reforma educacional por celos debido a tu experiencia como ex ministra?
No tiene ningún sentido hablar de eso.
Tú misma acusaste al Mineduc de hacerte una "encerrona" durante el congreso de la DC por el tema del lucro de la educación.
Eso es algo que ya pasó.
¿A Provoste le ha faltado hacer una autocrítica y reconocer errores?
No tengo juicio sobre eso.
¿Qué te parece lo mediático de sus apariciones luego de la votación en la Cámara de Diputados?
Esas son las formas de la política moderna; a mí pueden no gustarme, pero ella las utiliza bien. J.Cristobal Villalobos.
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