Aspiraciones a Credito

ASPIRACIONES A CREDITO

En días pasados junto con otros diputados presentamos un proyecto de ley que busca rebajar la tasa de interés máximo convencional que pueden cobrar las instituciones financieras por las operaciones de crédito de dinero, desde un 50% actualmente permitida por la ley a solo un 20%. Esta propuesta se basa en nuestra convicción que Chile necesita dar apoyo concreto a la clase media, que vive en constante tensión y con pocas probabilidades de contar con ayuda del Estado.

Hoy es un hecho indiscutible que el alto endeudamiento en que vive el país, es un síntoma de la imposibilidad de financiar con los ingresos familiares las distintas necesidades que se deben satisfacer cada mes. Esta situación solo puede ser abordada por medio del crédito, sea este compras a crédito o bien créditos de dinero. A partir de esta necesidad se desarrolló una industria del crédito, que en lo principal genera utilidades estratosfericas cuando la actividad económica es débil, cosa que hemos vivido durante los últimos años. Entonces sin entrar a cuestionar el fondo del funcionamiento del sistema financiero, hay que preguntarse cuales son las correcciones que se pueden intentar para dar mayor protección e igualdad de oportunidades a la clase media.

Este es el sentido de la propuesta que presentamos en el Congreso Nacional, porque ocurre que las personas naturales y las pequeñas y medianas empresas son los mayores demandantes de créditos, son los mejores pagadores y curiosamente son quienes pagan tasas de interés más altas. Entonces resulta que en vez de acceder a tasas preferenciales de interés se les cobran las más altas, abusando en cierta forma de su necesidad y sentido de responsabilidad.

De aprobarse nuestra iniciativa pensamos que los beneficios se extenderían a toda la clase media, por cuanto la rebaja del interés máximo convencional fijado en la ley incide directamente en la fijación del interés que también cobran las casas comerciales y multitiendas por las operaciones de crédito que realizan. Si a ello sumamos la baja del dólar, una pronta aprobación de este proyecto, se reflejaría en un respiro inmediato para quienes lamentablemente deben recurrir de manera incesante a la banca para financiar sus aspiraciones.

Es indudable que este proyecto de ley pretende ser una contribución para alivianar la carga mensual de miles de familias que viven endeudadas, pero en ningún caso implica renunciar a seguir trabajando para corregir un modelo económico y social en el que pareciera que hasta los sueños y aspiraciones hay que pedirlos prestados.

Por el contrario vamos a seguir proponiendo estas y otras iniciativas para que todos y todas puedan sentir que tienen el derecho a ser dueños de su propio destino, y sobretodo que tienen las herramientas para hacerlo realidad.

Diputado Pedro Araya Guerrero